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En resumen
Se busca presentar un ángulo de la aplicación de las ciencias sociales, a partir del enfoque
sociológico pero con perspectiva interdisciplinaria, que necesariamente resulta de interés para todo tipo de personas, en particular para estudiantes
universitarios pertenecientes a una nueva generación, y en el que todos tienen algo que decir y aportar en su experiencia vital.
Primeramente se
referirá a la ciencia como instrumento incorporado a la vida humana de la población común y corriente en las diversas capas sociales de una sociedad
altamente desigual y plural dentro de un país con una historia transcultural compleja. ¿Cómo abordarlo? Mediante una aplicación analítica de la vida
cotidiana vivida por unos y otros en confluencia y en conflicto; en acuerdos y desacuerdos, en conjunción y colaboración, dentro de los ámbitos de la
vida personal e interpersonal...Se plantearán, en especial, tres instancias básicas de la vida cotidiana: la vida familiar en procesos de transformación;
la vida ocupacional de estudios, de trabajo o de desocupación forzada o virtual; y la vida de relación social primaria, entre compañeros, amigos,
vinculaciones afectivas y amorosas, experimentada en ámbitos privados pero en el contexto de los medios públicos, un tanto masivos pero de roce cotidiano
en un contexto macrometropolitano...
En seguna instancia, se tratará de una reflexión más específica derivada de investigaciones sobre la vida de
las familias mexicanas, realizada durante las últimas diez décadas en México. En ellas aparecen necesariamente múltiples dimensiones de estudio: la
biológica. a partir del nacimiento, salud, enfermedad, crecimiento, reproducción, desarrollo de etapas de niñez, infancia mayor, pubertad, adolescencia,
juventud mayor, madurez inicial, media y avanzada. Todos esperamos poder experimentar lo que implican en nuestras vidas, no sólo en lo biológico y
bioecológico sino también, necesariamente, en lo psíquico, mental-racional, afectivo y volitivo, consciente y subconsciente. Todas ellas con certidumbres
e interrogantes profundas.
También siempre aparece en la vida familiar la dimensión económica con todas sus condicionamientos: de alimentación, de
habitación y supervivencia, con todos los conflictos de clase social involucrados. Igualmente aparece también el estudio de la dimensión normativa: moral y
de costumbres, de concepción ética frente a los demás, de estilos de vida, de modas y de transmodas, pero también de regulaciones y desregulaciones
jurídicas; de implicaciones de derechos humanos reconocidos o negados, rechazados, violados.
Se presentan, además, discriminaciones altamente
críticas: inequidades de género, violencias; conductas aprendidas -para bien o para mal- provenientes de las generaciones anteriores y otras nuevas,
propias de las generaciones jóvenes que intentan superar trabas normativas anteriores o buscar readaptaciones a nuevas formas de vida descubiertas por
aprender. En la vida familiar se involucran, también, las dimensiones: educativas y las implicación política, que pretenden, por un lado, encauzar la
vida colectiva de manera formal; frente a las que provienen de la dimensión religiosa y de una experiencia tradicional de lo sagrado; pero que buscan
la trascendencia de la vida natural. Todavía más: el estudio de la vida familiar implica la dimensión constructiva-arquitectónica y urbanística de las
viviendas y de casas-hogares por sencillas que ésta sean. Son importantes porque la vida íntima y social se desarrolla en ellas. Y de ahí se genera el
gusto estético-artístico y su sentido creativo, decorativo, al lado del ámbito íntimo de identidad. Pero por otro lado, la vida familiar y su espacio,
involucra la dimensión comunitaria del vecindaje que puede convertirse en situación de riesgo y desconfianza de las demás familias aledañas, pero ignotas,
desconocidas o peligrosas en el entorno citadino. Y de esta condición cercana-lejana de convivencia forzada, ahí está presente la dimensión asistencial,
la de la búsqueda de seguridad y resguardo ante la posible inseguridad, externa e interna de violación a la intimidad y a la autoprotección y resguardo de
la misma.
Finalmente se desarrollará indicativamente cómo se presenta la problemática de las relaciones familiares al presentarse los cambios,
cada vez más sensibles, de la vida familiar actual, ante los cuales se hace imprescindible la perspectiva de un enfoque "constructivista" de la vida propia
tratado por diversas corrientes en las ciencias sociales y humanas. Se hará mención de una docena de tendencias encontradas y analizadas por unos y otros
científicos de la vida moderna y posmoderna a las que ahora nos enfrentamos y que dan lugar a una serie avasallante de "revoluciones" de la cotidianidad;
entre ellas: la revolución demográfica dentro de la familia; la revolución epidemiológica biomédica y bioética; la revolución industrial y tecnológica del
hogar, así como la revolución comunicológica; la revolución de la secularización; la revolución de la descomunitarización rural y urbana; la revolución de
la sexualidad, y la del amor selectivo; la revolución de la perspectiva de género; la revolución de la desregulación jurídica e informal de los lazos
familiares; la revolución de las generaciones. Todas ellas con su problemática fenomenológica: intrínseca y circunstancial; al mismo tiempo que con sus
aportaciones neocivilizatorias, a veces difíciles de superar inercias o de confundir perspectivas.
Esto dará lugar a las intervenciones de los
asistentes en sus inquietudes y en sus propias propuestas de transformación familiar en perspectiva realista para abrir pistas de comprensión y encauzamiento
del nuevo mundo que debemos reconstruir entre todos, desde la vida cotidiana...
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